El presidente del Parlamento, Nabih Berri, condenó el hecho al subrayar: «Israel abofeteando a la humanidad con un increíble crimen de genocidio. Cientos de mártires y el número de asesinatos no se detiene».
Numerosos reportes indican que la explosión fue resultado de un ataque aéreo. Al menos 500 personas fallecieron en el suceso, indicó un portavoz del Ministerio de Salud palestino. Además, miles de personas resultaron heridas
Al respecto, el primer ministro interino, Najib Mikati, calificó de vergüenza para la historia de la humanidad el bombardeo de Tel Aviv contra los civiles indefensos en la institución hospitalaria.
En este sentido, el gobierno libanés decretó luto nacional mañana y las instituciones educativas cerrarán en solidaridad con Gaza y para condenar la brutalidad israelí.
Como un crimen de guerra que no puede tolerarse tildó el rey de Jordania, Abdullah II, la masacre del gobierno de Tel Aviv contra el hospital en Gaza.
A propósito, la cancillería suspendió la celebración mañana de la cumbre cuatripartita que incluía a los gobernantes de Estados Unidos, Egipto, Palestina y Jordania.
En este contexto, manifestantes prendieron fuego a la puerta de la embajada israelí en Amman e intentaron asaltarla para denunciar la masacre cometida por Israel mediante bombardeos contra el Hospital Bautista en el centro de Gaza.
Al mismo tiempo, el portavoz de la cancillería iraní, Nasser Kanaani, denunció que tal crimen brutal refleja el fracaso de Tel Aviv en adherirse a los principios internacionales más básicos durante la guerra.
Kanaani consideró que la sangre de los mártires de este incidente aumentaría la determinación del pueblo palestino que resiste y lucha por liberar su tierra de los ocupantes.
Por su parte, los ministerios de Asuntos Exteriores de Egipto, Qatar, Türkiye e Iraq llamaron a la comunidad internacional a asumir su responsabilidad y disuadir a Israel de cometer más crímenes contra civiles palestinos.
A través de una declaración, la oficina política del movimiento Ansar Allah en Yemen declaró que las violaciones israelíes, apoyadas por Estados Unidos y Occidente revelan al mundo entero el nivel de su brutalidad.
En esta línea de pensamiento, el comunicado destacó que las agresiones no disuadirán al pueblo palestino y a los movimientos de resistencia de continuar la lucha con más fuerza y solidez.
De acuerdo con cifras preliminares, más de 700 de palestinos murieron como consecuencia de un bombardeo deliberado israelí contra el hospital Bautista en Gaza que servía de refugio seguro a personas que huían de la agresión de los últimos días.
