Por Carmen de la Cruz
Santo Domingo.- La parroquia Domingo Savio terminó el campamento en el barrio capitaleño Los Guandules, donde participaron 157 niños y adolescentes que disfrutaron de un programa divertido y cultural.
Coordinados por el cura Eduard R. Figueroa Sánchez, alias Macoby, un equipo de 50 jóvenes, adultos y maestros, todos voluntarios, acompañaron a los campistas durante el desarrollo de las distintas actividades.
El campamento titulado Creación de Dios soy, desarrollando mi talento convivo con mi barrio permitió el desarrollo de actividades como talleres en las áreas de arte, dibujo, pintura, piano, violín, guitarra, batería, tambora, saxofón, teatro y otras.
También, charlas y talleres entre ellos sobre introducción a la Biblia para niños, mediante el cual se les instruyó sobre la Creación, composición e importancia del libro sagrado. Fue impartido por el novicio jesuita Francisco Roque Hernández.
Fue impartida también una charla por Fundación Arcoris sobre la preservación y protección del medio ambiente. Esa actividad terminó con un taller de flores hechas con materiales reciclados.
Anny Melo coordinó un taller sobre herramientas “para fortalecer mi persona, para cumplir y hacer cumplir los deberes y derechos que tengo como individuo, en el hogar y en comunidad”.
En el último día el campamento inició con una eucaristía en la parroquia, preparada a por los niños. Los menores demostraron los conocimientos adquiridos con diferentes exposiciones artísticas.
En la tarde hubo un rally donde también participaron los padres y tutores, “quienes valoraron como muy positivas las actividades.
El sacerdote
El padre Macoby dijo que se trató de 15 días de desarrollo de talentos de todos los campistas, en las diferentes áreas artísticas y en la parte humana.
El religioso resaltó el enfoque del campamento, que fue basado en los valores cristianos, familiares y comunitarios, “para el buen desarrollo de una República Dominicana fuerte”.
El párroco de Los Guandules agradeció a todas las personas, e instituciones, tanto a nivel nacional como internacional, por el apoyo brindado para que los niños y adolescentes hayan disfrutar de “tan productivo y maravilloso campamento”.
El padre Macoby expresó sus propósitos de tocar puertas otra vez, para proseguir con los aportes a la formación artística y cultural en sentido general.