Nueva York.- El discurso de Luis Abinader que sobrepasó los 50 minutos «ignoró» a un conglomerado humano que supera los 2 millones, «genéricamente denominado comunidad dominicana en ultramar», declaró Luis Mayobanex Rodriguez, coordinador general de Alianza Pais (AlPaís) en Ultramar.
Según Rodríguez, Abubader de esta forma «dejó un desagradable ´tufo´ clasista que penetro las paredes del Gran Teatro Cibao y se esparció dentro y fuera del territorio nacional».
El dirigente de AlPaís confirmó el «menosprecio de la oligarquía dominicana hacia nuestros migrantes».
A su entender, se trató de un discurso preñado de cifras, reales o no, donde se fue en elogios al empresariado de áreas como el turismo, energía, zonas francas
«No tuvo la honradez de reconocer el extraordinario valor que representan nuestras remesas en el desarrollo de la economía nacional , en la estabilidad en la macro economía y en su fervorosa aclamación de que las reservas internacionales del país están situadas por vez primera en 14 mil millones de dólares», precisó.
Rodríguez se refirió al «orgullo» que Abinader mostró al aclamar como éxito de su gobierno la apreciación de la moneda nacional, debió encontrar un mínimo de humildad.
El dirigente de AlPaís dijo que cuando el jefe del Estado se refirió al comportamiento de la moneda nacional «también tiene que ver con el sacrificio de cientos de miles de mujeres y hombres trabajadores migrantes, que muchas veces viven en condiciones humanas críticas para poder enviar el dinero que requieren millares de familias desatendidas y olvidadas por gobiernos entregados a los brazos de la oligarquía».
Rodríguez declaró que el Presidente obvió con toda mala intención que el monto de las remesas anuales equivalen al 50% del presupuesto nacional.
Claro, nada se dice al respecto porque muchos de los supuestos logros del gobierno no responden a sus políticas públicas, sino, indudablemente, a los multimillonarios aportes de unos migrantes frente a los cuales el Estado no les reconoce ni respeta derechos algunos.
Desde la óptica del presidente la comunidad dominicana seguirá siendo un conglomerado humano sin derechos, pero si con deberes.
El discurso de Abinader justifica el proceder de denuncia y confrontativo de los aliancistas de ultramar. Por eso reiteramos que su cacareado discurso del cambio no ha llegado y parece que no llegará al seno de las comunidades dominicanas.
Se puede afirmar que de cara a nuestros migrantes la diferencia del actual gobierno con los 20 años de gobiernos del PLD radica en el color del partido gobernante, no en ejecutorias de políticas públicas sustantivas, dijo.