Por Fernando de los Santos
La Ley 122-05 sobre Regulación y Fomento de las Asociaciones Sin Fines de Lucro en la República Dominicana es una legislación que ha sido muy importante para el sector de las organizaciones sin fines de lucro. Esta ley establece un marco legal que regula la creación, funcionamiento y supervisión de estas entidades, con el objetivo de promover su transparencia, eficacia y buen gobierno.
Algunos de los beneficios que ofrece la Ley 122-05 a las asociaciones sin fines de lucro en la República Dominicana son:
Reconocimiento legal: La ley establece un marco jurídico claro que reconoce la existencia y legitimidad de las asociaciones sin fines de lucro, brindándoles protección y seguridad jurídica.
Facilidades administrativas: Simplifica los trámites y procedimientos para la creación y registro de estas entidades, lo que facilita su constitución y operación.
Incentivos fiscales: Brinda beneficios fiscales a las asociaciones sin fines de lucro, como la exención de impuestos sobre sus ingresos y actividades, siempre y cuando cumplan con ciertos requisitos y condiciones.
Transparencia y rendición de cuentas: Establece normas y obligaciones para garantizar la transparencia en la gestión financiera y administrativa de las asociaciones, así como la rendición de cuentas a sus miembros, donantes y la sociedad en general.
En resumen, la Ley 122-05 ha sido fundamental para fortalecer y promover el desarrollo del sector de las asociaciones sin fines de lucro en la República Dominicana, brindando un marco legal adecuado para su funcionamiento y fomentando su contribución al bienestar social y al desarrollo sostenible del país.En la República Dominicana, las asociaciones sin fines de lucro deben cumplir con ciertos requisitos y condiciones para poder acceder al presupuesto nacional. Algunos de los requisitos y condiciones comunes suelen ser:
Estar legalmente constituidas y registradas como asociaciones sin fines de lucro en los organismos correspondientes.
Tener una misión y actividades que estén alineadas con los objetivos de desarrollo social o comunitario del país.
Contar con una estructura organizativa clara, que incluya una junta directiva o similar, así como un plan de trabajo o proyectos definidos.
Presentar informes periódicos sobre sus actividades, finanzas y resultados, de acuerdo a las normativas establecidas por las autoridades competentes.
Cumplir con las obligaciones fiscales y legales pertinentes, como la presentación de declaraciones fiscales y el cumplimiento de las leyes laborales.
Demostrar transparencia en su gestión y manejo de recursos, incluyendo la rendición de cuentas a sus miembros, donantes y la sociedad en general.
Tener un impacto positivo en la sociedad y en las comunidades a las que sirven, demostrado a través de evaluaciones, informes de impacto o testimonios de beneficiarios.
Cabe destacar que los requisitos específicos pueden variar según la jurisdicción y las políticas de financiamiento del gobierno dominicano en un momento dado. Se recomienda a las asociaciones interesadas en acceder al presupuesto nacional que se informen directamente en los organismos competentes para conocer los requisitos actualizados.
