Bogotá, 22 nov (Prensa Latina) Un día después del multitudinario paro nacional en Colombia, el presidente Iván Duque anunció hoy que la semana próxima dará inicio a ‘una conversación nacional que fortalezca la agenda vigente de política social’.
Esto se dará en todas las regiones con todos los sectores para edificar un camino significativo de reformas, expresó durante una alocución televisiva que tuvo lugar tras algunas manifestaciones, choques, saqueos y hechos vandálicos que se registraron este viernes, sobre todo, Bogotá.
A juicio de Duque, el inicio de esta conversación en todo el territorio nacional ‘nos permitirá seguir fortaleciendo nuestra democracia y que todos unidos pasemos las páginas del odio, la violencia y la desigualdad’.
Dijo que decidió fortalecer la presencia de la fuerza pública y aumentar el despliegue de inteligencia para garantizar la seguridad en los lugares y precisó que se han capturado 146 personas por violencia, obstrucción de vías y daño en bien ajeno, entre otras causas.
También informó que dio instrucciones a los Ministerios de Justicia y Defensa a fin de realizar las acciones necesarias ‘para judicializar a los delincuentes que afectan la tranquilidad de la ciudadanía’.
Los que incitan al odio no representan a los colombianos. El gobierno cree en el diálogo social, somos un gobierno que escucha, afirmó.
La alocución de Duque tuvo lugar después de conocerse que regirá el toque de queda en Bogotá desde las 21:00, hora local de hoy, hasta las 5:00 de mañana.
Acorde con la información divulgada, en las próximas horas se analizará si dicha disposición se prolongará por más días.
Desde el mediodía de hoy rige la ley seca en Bogotá, medida que las autoridades atribuyeron a la necesidad de minimizar los riesgos de violencia.
Medios locales de prensa reportaron alteraciones del orden público, saqueos y hechos vandálicos en algunos puntos de la capital colombiana, al tiempo que miembros del Escuadrón Móvil Antidisturbios de la Policía Nacional disolvieron manifestaciones pacíficas en algunos puntos.
Tales hechos tuvieron lugar un día después de que cientos de miles de colombianos se volcaran a las calles como parte de un paro nacional en rechazo a políticas del gobierno, contra la violencia y por la vida.
Si bien en su mayoría las protestas transcurrieron de manera pacíficas, en varios lugares se registraron disturbios y represión policial.
Los organizadores del paro resaltaron el espíritu pacífico de las movilizaciones que tuvieron lugar la víspera, al tiempo que rechazaron las acciones violentas que siguieron a esas marchas.
Varias voces coinciden en que detrás de los hechos vandálicos se oculta el interés en deslegitimar esas protestas pacíficas a las que se sumaron miles de personas a fin de lograr que el gobierno implemente acciones concretas encaminadas a solucionar problemas que golpean a los colombianos en áreas como educación, salud, agricultura y seguridad.
