Santo Domingo.- Las mujeres organizadas en la Plataforma de Género del Noreste (PGNE) declararon que es inaceptable permanecer en silencio ante la realidad actual que afecta a sus compatriotas en República Dominicana.
No se trata de casos o incidentes aislados, dijo la PGNE en un documento que firma su coordinadora, Jesula Blanc. “Esta es una política deliberada, una persecución sistemática”.
Blanc se hizo eco de informaciones en el sentido de que los servicios de inmigración dominicanos ingresan a los hospitales con el objetivo de detener a las mujeres haitianas que están dando a luz.
“Los verdugos”, dice la organización en su documento, “los expulsan sin tener en cuenta la salud de las madres y los recién nacidos”.
En el lado de Juana Méndez
De acuerdo con la organización, en tan sólo ocho días, en la frontera haitiana colindante con Dajabón el número de repatriados atendidos en el lado Oeste, en Juana Méndez, fueron recibidas 3.222 personas repatriadas desde el territorio dominicano.
De ese total, según señalan las mujeres en su documento, 2.289 fueron hombres, 98 niñas, 93 niños, 100 ancianos, 20 personas con discapacidad y 24 niños no acompañados.
Asimismo, habían 742 mujeres, “de las cuales 53 estaban embarazadas y 60 en período de lactancia”.
Bebés amamantados
En total, el número de bebés fue de 76, 60 de los cuales aún son amamantados, dijeron las mujeres de la PGNE.
Estos últimos grupos, es decir los bebés, las mujeres embarazadas y las mujeres lactantes, “están verdaderamente traumatizados por las condiciones inhumanas de deportación, que constituyen una flagrante violación de sus derechos”.
Peor aún, las mujeres embarazadas en labor de parto son abandonadas sin atención en los patios de los hospitales, capturadas con todo el dolor del parto y obligadas a entrar en contenedores de transporte inadecuados, según testimoniaron en el documento.
Paras la Plataforma de Género del Noreste (PGNE) estos casos constituyen verdaderamente actos de barbarie “que desconocen cualquier principio de derechos humanos y deben llamar a los organismos nacionales e internacionales de derechos humanos a tomar acciones expresas a favor de estas víctimas”.