Por Manuel Otilio Pérez Pérez
En tiempos de la «guerra fría», fue tradicional el comportamiento de los Estados Unidos de apoyarse en los gobiernos duros y/o fuertes, para derrocar mediante Golpe de Estado a gobernantes no tan complacientes, acusados de «comunistas o pro comunistas»; ese es el caso de el gobierno fuerte de Duvalier y el nuevo gobierno dominicano de Juan Bosch.
Según Víctor Grimaldi en su libro «Juan Bosch el comienzo de la historia», Alfa & Omega, 1990, en su página 28, nos dice que el conflicto surgido entre los gobiernos de Bosch de República Dominicana y el de Duvalier de la República de Haití, quien lo desató, no fue Bosch, que fue Duvalier quien desató la crisis.
Por su parte, Miguel Guerrero en su obra «El Golpe de Estado Historia del derrocamiento de Juan Bosch», Editora Centenario, 2013, pág 145, señala que habían ocurrido dos crisis diplomático-militar entre los gobiernos de Bosch y de Duvalier en tan solo cinco meses.
Continúa Miguel Guerrero pág 146, el antagonismo entre Bosch y Duvalier era muy grande para la isla de Santo Domingo, no podían coexistir uno al lado del otro.
Duvalier se inventó la coartada contra el teniente haitiano Francois Benoit para afectar a Bosch (Benoit estaba asilado en la Embajada dominicana en Puerto Príncipe), (ob cit, pág 147).
Bosch estaba seriamente disgustado con Duvalier, porque este había dado permiso de residencia a miembros de la familia Trujillo que se decía conspiraban contra él.
El Partido Revolucionario Dominicano y su candidato presidencial Prof. Juan Bosch habían ganado las elecciones del 20 de diciembre de 1962, a la Unión Cívica Nacional y Viriato Fiallo.
A los 8 días de esa victoria se produjo «la matanza de Palma Sola», donde se esperaban ayudas económicas y armas desde Haití, según rumores de esos tiempos.
Tropas haitianas de Duvalier violaron el recinto de la Embajada dominicana, añadiendo con esto otro ingrediente de fricción entre los dos gobiernos.
«Haití conspiraba contra el Gobierno dominicano» dijo Juan Bosch, y en esa conspiración están vinculados los Trujillo. (ob cit pág 148).
Duvalier pidió el cierre de los consulados de Ouanaminthe y de Cabo Haitiano. Esa acción de Duvalier se produce «cuando hay ánimo de insultar a los dominicanos o cuando se desea provocar una ruptura de relaciones».
Otra ofensa del Gobierno de Haití a Bosch fue otorgarle salvoconducto a solo 6 de 28 haitianos asilados en la Embajada dominicana.
En la pág 149, Guerrero refiere que, Duvalier, según Bosch, estaba interesado en su eliminación física. Se remontaban los hechos al período en que Bosch no había ascendido a la presidencia. En enero de 1963, citaba el Presidente Bosch, el Gobierno haitiano fraguó un complot para matarlo.
El presidente Bosch sospechaba que las incursiones guerrilleras contra Haití tuvieron que ver con el aspecto secreto del derrocamiento del gobierno constitucional electo el 20 de diciembre de 1962, (Juan Bosch, Crisis de la democracia de América en la República Dominicana, capítulo XVII, pp 179-180).
«Hasta que se produjo la invasión del 22al 23 de septiembre de 1963, del General Cantave, por Dajabón, quien quedó evidenciado y fue detenido, siendo este INCIDENTE DOMINICO-HAITIANO lo que precipitó el Golpe de Estado contra Bosch de acuerdo con el análisis del 25 de septiembre hecho por el Departamento de Estado».
Cantave pudo continuar luego del Golpe de Estado, como venía operando desde antes ¿por qué no continuó? ¿ya había cumplido su misión?, pues Duvalier si continuó. (Víctor Grimaldi, ob cit, pág 31).
«Feliz por haber asistido a la caída de su enemigo irreconciliable, Duvalier deja dormir el proceso que se proponía seguir contra los dominicanos. Puesto ya se ha desembarazado de Bosch, prefiere no indisponerse con los nuevos dirigentes», (Víctor Grimaldi, El misterio del Golpe de 1963, Editora Amigo del Hogar, 1985, pág 93).