Más de 150 personas murieron durante el ataque armado llevado a cabo por bandidos en la noche del domingo 26 al lunes 27 de enero de 2025, en Kenscoff, una comuna haitiana ubicada en el Departamento Oeste, según un informe no exhaustivo de la “Fondasyon Je Klere (FJKL), que no aporta como prueba siquiera una fotografía. Entre las víctimas se encuentran una madre y sus seis hijos. Los bandidos los quemaron vivos y también prendieron fuego a más de cien casas, informó FJKL.
Por Célou Flécher
Puerto Príncipe, LE FACTEUR HAITI, 6 de febrero de 2025. _ La Fundación Je Klere (FJKL) ha comunicado su informe sobre el saldo humano del ataque armado en Kenscoff.
Los datos proporcionados por la organización de derechos humanos reportan más de 150 personas asesinadas por bandidos armados, mientras que las autoridades locales hablan de alrededor de cuarenta, según FJKL.
Entre las víctimas se encuentran una madre, Cérilis Paul y sus seis (6) hijos, quemados vivos por los pandilleros, según el informe provisional publicado por la estructura que se extiende del 26 al 30 de enero de 2025.
Fondasyon Je Klere (FJKL) es una organización de vigilancia ciudadana sin fines de lucro comprometida “con la transformación de un estado fallido en un estado moderno”, democrático y popular, respetuoso de los derechos humanos y las reglas del buen gobierno. Entre sus dirigentes están Yolaine Gilles y el abogado Samuel Madistin
Según la FJKL, las familias fueron diezmadas y entre 6 y 10 de las personas que murieron había mayores asesinadas y otras desaparecidas.
Es el caso de Caristène Joseph, de 83 años, fue asesinada en “Kafou Bèt”, mientras que Caristène Joseph, de 95 años, se encuentra desaparecido.
Los crímenes se cometieron en varias localidades, según la FJKL, entre ellas Kafou Bèt, Kikwa, Gode, Belot, Bongard, Lahate Bongard, Ti Plas, Previtè, Nan Pitimi, Sous Rozo, Bwa Majò, Grande Source.
Fracaso del Estado
Además de los asesinatos, la Fundación Je Klere informó que más de un centenar de casas fueron incendiadas por los bandidos durante su incursión en diferentes localidades de Kenscoff. Antes de prenderles fuego, los saquearon y torturaron o mataron a sus ocupantes, escribieron los investigadores de FJKL.
Para la organización de derechos humanos, el Estado fracasó en su misión de proteger la vida y los bienes de la población, porque la masacre de Kenscoff costó la vida a decenas de personas inocentes e indefensas, mientras que al igual que la de Pont Sondé, podría haberse evitado si las autoridades hubieran mostrado un mayor sentido de responsabilidad, indicó.
En opinión de la FJKL, los Ministros del Interior, de Justicia y de Seguridad Pública, así como el Director General de la Policía Nacional de Haití, deberían haber dimitido después de esta masacre. Estos últimos, según ella, son directamente responsables del fracaso del Estado en este asunto. Sin embargo, en lugar de retirarse, se han involucrado en disputas públicas, lamenta.
Las recomendaciones
Por otra parte, la Fundación Je Klere (FJKL) dice que recomienda la atención a las víctimas de la masacre, el restablecimiento del orden público en la comuna de Kenscoff, la detención de los asesinos identificados y el juicio de los autores y cómplices de la masacre.
Asimismo, el apoyo a los desplazados internos causados por la masacre y el desmantelamiento de las bandas armadas para prevenir nuevas masacres.
