Caracas, RT.- Un nuevo escándalo surge desde las entrañas del extremismo opositor venezolano. Esta vez el señalamiento viene del economista Francisco Rodríguez, a quien el Gobierno de Venezuela señala como uno de los «cabecillas de la mafia» que colaboró con el despojo de la refinería estatal Citgo en EE.UU. como parte de las acciones ejecutadas durante la usurpación con fines sediciosos del llamado «gobierno interino» de Juan Guaidó.
Según Rodríguez, el interinato de Guaidó, tras recibir en 2019 el reconocimiento internacional de EE.UU. y de otros países alineados con Washington, desvió al menos 322,5 millones de dólares junto con los exdiputados de la Asamblea Nacional electa en 2015, quienes tras vencer su período de funciones, se autoproclamaron como supuesto Poder Legislativo en el falso gobierno opositor.
«Los 322,5 millones de dólares que se han gastado en la Asamblea Nacional de 2015 y el gobierno interino son más de tres veces el presupuesto anual de funcionamiento de la Organización de Estados Americanos (90 millones)», escribió Rodríguez en X, al citar cifras del llamado «BCV Ad Hoc», que usurpa funciones del Banco Central de Venezuela para administrar ―con respaldo internacional― los recursos del Estado venezolano retenidos en el extranjero.
Estos fondos, que deberían ser controlados legalmente por el Gobierno de Nicolás Maduro, continúan bajo control del extremismo opositor tras ser retenidos por la Reserva Federal de Nueva York desde 2019, a raíz de la creación del estado paralelo o «Gobierno interino» que decidió respaldar EE.UU. durante la primera administración de Donald Trump para intentar tomar el poder por la fuerza en Venezuela.
De acuerdo con el «balance general» de la «junta administradora ad-hoc» del falso BCV, el monto total desviado en la usurpación de Guaidó sería de 322.544.350 dólares, dinero que fue otorgado como «créditos». Además, el informe detalla que la suma de todos los fondos que controlaría el extremismo opositor en el extranjero supera los 3.530 millones de dólares; de los cuáles más de 3.400 están el Banco de Inglaterra; otros 121 millones en el Deutsche Bank de Alemania; y más de 8 millones en «otras cuentas de orden».
Los $322,5 millones de dólares que se han gastado en la Asamblea Nacional de 2015 y el gobierno interino son más de tres veces el presupuesto anual de funcionamiento de la Organización de Estados Americanos ($90 millones), declaró Francisco Rodríguez
Según el diario El Nacional, de marcada línea editorial opositora en Venezuela, el economista Rodríguez ha advertido que «las maniobras» del dinero estatal en el extranjero «no solo podrían constituir una ilegalidad constitucional, sino también alimentar prácticas opacas«. Además, indica que desde 2023, se ha exigido que esos fondos «sean utilizados para la creación de un Fondo de Protección Social, propuesto en la mesa de negociación de México, y administrado por la ONU para asegurar transparencia».
«A pesar de que las estructuras opositoras continúan sesionando virtualmente y controlando parte del patrimonio estatal en el extranjero, el manejo poco claro de estos recursos ha desatado un debate sobre la legitimidad de estas entidades en 2025. La opacidad, los conflictos de interés y la falta de rendición de cuentas resurgen como desafíos cruciales para quienes aspiraban a liderar una transición democrática en Venezuela», añade el mencionado medio.