Castro se pronunció en esos términos durante la inauguración de una nueva subestación eléctrica con capacidad de generación de 15 megavatios en el municipio de Santa Rita, en el noroccidental departamento (región) de Yoro.
La mandataria acusó al anterior Ejecutivo del derechista Partido Nacional de haber provocado el colapso deliberado de las compañías estatales, con el objetivo de justificar su ulterior traspaso al sector privado.
“Durante 12 años y siete meses, se encargaron de destruirlas para decir que el Estado no podía administrarlas y que había que privatizarlas”, denunció la presidenta, en alusión al periodo conocido como narcodictadura, encarnada por los nacionalistas en contubernio con el Partido Liberal.
El régimen del llamado bipartidismo fue establecido tras el golpe de Estado del 28 de junio de 2009, perpetrado contra el entonces presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya (2006-2009), actual líder del oficialista Partido Libertad y Refundación.
En su alocución de este martes, Castro subrayó que su gestión de tres años y cuatro meses representa una etapa de transición de la dictadura a la democracia, en la cual se demostró -enfatizó- que el Estado puede funcionar sin recurrir a nuevos impuestos.
“Estamos administrando de forma transparente y sin imponer un solo impuesto al pueblo”, puntualizó la gobernante.