El multimillonario estadounidense Donald tomó posesión el lunes 20 de enero de 2025, durante una ceremonia oficial celebrada en el Capitolio, como 47º presidente de Estados Unidos, sucediendo a Joe Biden. En su discurso, el nuevo inquilino de la Casa Blanca promete montañas y maravillas a los estadounidenses. Al mismo tiempo, Donald Trump anuncia la activación del proceso de deportación masiva de millones de “criminales indocumentados” que viven en suelo estadounidense.
Por Célou Flecher
Puerto Príncipe (EL FACTOR HAITÍ), 20 de enero de 2025._Dos meses y medio después de ganar, contra Kamala Harris, las elecciones presidenciales estadounidenses organizadas el 6 de noviembre de 2024, Donald tomó posesión, el lunes 20 de enero, como 47º presidente de los Estados Unidos.
La ceremonia de inauguración tuvo lugar en el Capitolio, en presencia del presidente saliente Joe Biden, la vicepresidenta Kamala Harris y otros altos dignatarios estadounidenses.
De entrada, el nuevo inquilino de la Casa Blanca (nombre del Palacio Presidencial estadounidense), declaró que hoy comienza la época dorada de Estados Unidos gracias a su regreso oficial a la cima del estado.
Promete, durante su mandato presidencial de cuatro años, colocar a Estados Unidos en primer lugar para restaurar la seguridad y la justicia social y ayudar a la estrellada República a recuperar su grandeza y su valor a los ojos del mundo.
Donald Trump aprovechó su toma de posesión para criticar a la anterior administración Biden/Harris, que, según dijo, ni siquiera podía gestionar una crisis nacional, ni siquiera proteger a los ciudadanos estadounidenses y sus inversiones.
Al mismo tiempo, el 47º presidente estadounidense, que inicia su segundo mandato, acusa al gobierno de proteger a los “criminales” que provienen de instituciones psiquiátricas y prisiones en cuatro rincones del mundo.
«A partir de hoy, todo eso cambiará, y rápidamente, para poner fin a la decadencia de Estados Unidos, porque mi vida se salvó por una razón: permitir que Estados Unidos recupere su grandeza», espetó el republicano.
En el frente migratorio, el nuevo presidente estadounidense promete un infierno a los inmigrantes que viven ilegalmente en Estados Unidos. Para limitar el flujo migratorio, Donald Trump informa que declarará el estado de emergencia en la frontera sur del país para bloquear inmediatamente cualquier entrada irregular a suelo americano.
“Reiniciaremos el proceso de deportación masiva de millones de “criminales indocumentados”, los enviaremos a sus países de origen y reactivaremos la política migratoria de “quedarse en México ”, advierte el presidente Donald Trump.
Para garantizar el estricto cumplimiento de las medidas anunciadas, Donald Trump dice que desplegará soldados estadounidenses en la frontera para repeler esta invasión de extranjeros en territorio estadounidense.