Por Germán Reyes
Santo Domingo.- El primer ministro, Ariel Henry, logró entrar y sentarse en un banco de la Cathedrale Du Souvenir (Catedral del Recuerdo) de la norteña ciudad haitiana de Gonaïves, a diferencia de Pont-Rouge, donde debió devolverse para no ser víctima de las balas que disparó la banda de Jimmy Chérizier cuando intentó realizar una ofrenda floral en honor a Jean Jacques Dessalines, el padre fundador de la Nación.
Pero una parte de los 1,000 agentes de unidades especializadas de la Policía Nacional de Haití (PNH), 500 delegados militares y 3 tanques blindados que había desplegado en la ciudad para protegerle debió acudir en su auxilio, bajo una lluvia de balas y abandonar la sede religiosa para evitar que corra la suerte de al menos tres soldados y tres civiles que cayeron abatidos en un enfrentamiento con la banda Nou se revolusyonè (Somos revolucionarios).
Para garantizar la protección de Henry el ministro de Defensa, Enold Joseph, natural de Gonaïves, habría distribuido unos 41 millones de gourdes para facilitar la participación del primer ministro de facto en Te Deum en una catedral a la que no acudieron sus fieles, según informó el periódico haitiano Rezo Nòdwès.
Las actividades oficiales ya están comenzando, pero en una Iglesia totalmente vacía. Puedes escuchar disparos esporádicos incluso cuando estás dentro de la Iglesia. Los ministros ( #Justice , #Intérieur , #Défense ) están junto al PM. Fuerte presencia de la PNH y las Fuerzas Armadas», informó Clin D’oeil Info (@clindoeilinfo)
.En la Cathedrale Du Souvenir de Gonaives, inaugurada el 1 de enero de 1954, solo estuvieron presentes miembros del gobierno de facto, señaló el ex diputado Antoine Rodon Bien-Aimé.
El ex legislador dijo que el Te Deum fue cantado solo por el monseños Yves-Marie Péan» por y con Ariel Henry». Sin embargo, este último, a pesar de su victoria pírrica, no pudo subir a la plataforma para entregar su mensaje a la Nación, desde la Ciudad de la Independencia, señaló el exparlamentario.
Los últimos dos años en el cargo, el asesinado presidente Jovenel Moïse se vio obligado a rendir tributo en el Museo Nacional del Panteón Haitiano, muy cercano al Palacio Presidencial, para evitar las masivas protestas de sus opositores.
El pasado jueves el ex parlamentario Bien-Aimé expresó su asombro por la terquedad del Primer Ministro de facto de querer pronunciar un discurso en Gonaïves el 1 de enero, a pesar de la oposición mostrada por parte de la población por esta visita “indeseada”. En la víspera un soldado que trabajaba en la instalación del stand donde expondría Henry fue muerto a tiros por ciudadanos que protestaban contra la visita del jefe del gobierno.
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