Santo Domingo.- El presidente Luis Abinader evitó responder de manera directa a la alusión de manifestantes apostados en los frentes del Palacio Nacional en reclamo de que se les reconozca la nacionalidad dominicana en función de diversas leyes.
“Si no soy dominicano, Abinader tampoco”, vociferaban con cánticos entonados con ritmo de música típica a base de güiras, tamboras y otros instrumentos de percusión, a propósito de cumplirse un aniversario de la sentencia 168-13, emitida por el Tribunal Constitucional el 23 de setiembre de 2013.
Mediante esa disposición a cientos de miles de dominicanos de ascendencia haitiana les fueron anulados sus documentos de identidad y electoral. Luego les fue restablecida a una parte en virtud de ley 169-14 y el decreto 250-14.
Pedir la expedición de permiso de residencia para hijos de extranjeros nacidos en el país, no es una buena iniciativa, dijo el Movimiento Socio Cultural de Trabajo Humanitario y Ambiental (Mosctha), cuyos dirigentes participaron en la protesta de los frentes del Palacio Presidencial. “La aplicación jurisdiccional de la Ley 169-14 y el decreto 250-14 deben generar una solución en el marco de la legislación dominicana, sin violentar la Constitución vigente al momento del nacimiento de las personas afectadas”.
Los manifestantes dijeron que, al ser nacidos en la República Dominicana antes de la entrada en vigencia de la actual Constitución de 2010 donde se aplicaba el jus solis, tienen derechos plenos como dominicanos y exigieron el reconocimiento. El jus solis permitía conceder la nacionalidad a todo nacido en el territorio dominicano.
Además, quienes reclamaron frente a la Presidencia exigieron poner fin a la discriminación racial y al apartheid que, “continúa vigente en el país”.
“Se debe esperar”
Abinader declaró durante su encuentro La Semanal realizado en Nueva York, donde acude para participar en la Asamblea de las Naciones Unidas el miércoles próximo, que “se debe esperar”.
El presidente dominicano aseguró, pese a las innúmeras denuncias, incluso ante organismos internacionales con centenares de casos específicos, que “nosotros estamos respetando los procesos para cumplir la ley y la Constitución”.
