Por Manuel Otilio Pérez P.
La Masonería vino a la isla antes Española, por el Occidente, cuando este era Colonia Francesa de Saint Domingue. La trajo el señor Etienne Morin en el año de 1762, y estableció una Logia del rito escocés, siendo esta la primera en el Continente.
En el Oriente de la isla, continuó la Dominación Francesa, por medio del Tratado de Basilea suscrito entre España y Francia en 1795 y fue el General Ferrand el fundador de la Logia «Fraternite», siguiendo la orientación de las logias francesas, en el año de 1803.
Las tropas francesas fueron derrotadas en la Batalla de Palo Hincado por tropas integradas por dominicanos-españoles (domiñoles, MOPP) comandadas por el Brigadier Juan Sánchez Ramírez, los vencidos se marcharon en julio de 1809, con ellos se fue su logia.
Tomás Bobadilla Briones se inicia en la Masonería en las reuniones clandestinas que realizaban los pocos Masones que quedaban en Santo Domingo luego de la capitulación de los franceses en julio de 1809, esas reuniones se daban en la sacristía del Convento de los Dominicos y en Las Cuevas de Santa Ana (Mons. Hugo E. Polanco Brito, La Masonería en la República Dominicana, UCMM, 1985, pág 27).
Al final del período conocido en nuestra historia como De La España Boba, en el año de 1819, el Gobernador Español de la Colonia Santo Domingo, Señor Pascual Real fundó la Logia Simbólica «Philantropia» a nombre del Gran Oriente de España. En esa fecha Tomás Bobadilla Briones era al mismo tiempo Tesorero de esa logia, Escribano Público y Notario Mayor del Arzobispo Valera Jimenes.
Cuando terminó la «España Boba» cesó el dominio español; se fueron los españoles, con ellos se fue su logia.
El Dr. José Núñez de Cáceres, líder de la proclamación del Estado Libre del Haití Español, bajo la Protección de la Gran Colombia, nuestra historia la llama «Independencia Efímera «, también era Masón. No abolió la esclavitud por eso fue efímera.
La Masonería Haitiana vino con los dominadores encabezados por su Presidente J. P. Boyer y fue fundada «La Constante Unión» en el año de 1822, bajo la dirección de La Gran Cámara Simbólica de Haití, En una de las anexidades del abandonado Colegio de los Padres Jesuitas, calle Las Damas. Tomás Bobadilla Briones fue su Venerable Maestro.
Durante la Dominación Haitiana fueron fundadas varias logias en Azua, El Seibo, Puerto Plata, etc.
Para la noche del 27 de Febrero de 1844, al darse el grito de libertad en el Baluarte del Conde, iniciándose así la vida libre de nuestro pueblo, el Venerable Maestro Don Tomás Bobadilla Briones gritó: «Vviva la República Dominicana. Viva la virgen María, (Mons. Hugo E. Polanco Brito, La Masonería en la República Dominicana, UCMM, 1985, pág 33).
Tomás Bobadilla Briones proclamó la Independencia y puso fin a la dominación haitiana.
Con la salida de los haitianos el 29 de febrero de 1844, con ellos se fue su logia.
Tomás Bobadilla Briones propuso que se creara una Gran Logia Nacional, sin dependencia de nadie, en el local de la cuna de América.
En 1858, la Gran Logia Nacional tuvo como representante Supremo a Don Tomás Bobadilla Briones.
El 3 de octubre de 1858, tuvo nacimiento la Gran Logia Nacional.
El 17 de febrero de 1866, se hace la Constitución del «Gran Oriente Nacional de la República Dominicana «, con absoluta independencia de toda otra autoridad masónica extranjera…con la Facultad de darse sus leyes.
Tomás Bobadilla Briones, gran maestro y fundador de la Gran Logia Dominicana, antes Gran Logia Nacional.
