Por Germán Reyes
Santo Domingo.- Como si hiciera falta para exhibir su poderío, los grupos armados desafiaron al poder en Haití, una vez más, al dar un paso al frente. Secuestraron a un agente de la seguridad del Palacio Presidencial.
El entorno de la mansión presidencial es objeto de balaceras, secuestros, violaciones y otras acciones violentas. El accionar de las bandas armadas es ostensible en Champ de Mars y en el barrio Bel Air, próximas a las sedes de la Policía Nacional y de la Presidencia.
Diversas personalidades y líderes de instituciones y organizaciones insisten en críticas al primer ministro Ariel Henry porque los bandidos continúan cometiendo sus crímenes con total impunidad y tranquilidad.
Los estratos sociales más desfavorecidos se ven golpeados por la inseguridad. Sólo los miembros de la élite de la sociedad y las más altas autoridades gubernamentales se libran de los actos de secuestro, dijeron medios de la capital haitiana, Puerto Príncipe.
Agente de la USGPN
Este jueves 28 de julio de 2022, Gaby Fils, policía adscrito a la Unidad General de Seguridad de Palacio Nacional (USGPN), fue secuestrado por hombres fuertemente armados, informó el periódico Rezo Nòdwès.
El agente, de la 5° promoción de la Policía Nacional de Haití (PNH), fue secuestrado en la zona de Tabarre “60” cuando se disponía a regresar a su domicilio.
El primer ministro Ariel Henry hizo varias promesas, garantizando la seguridad y la libre circulación de la población. Hasta la fecha, sin embargo, se han quedado en letra muerta.
El director general de la PNH, Frantz Elbé, también había prometido a los usuarios de la ruta nacional número 2 que todo volvería a la normalidad. También en este caso, las pandillas continúan operando con impunidad.
