Por Marciano Mateo E.
Santo Domingo.- La caída de la economía sin presidentes en la historia de los pueblo de la frontera causa un real estado de preocupación entre centenares de familias que durante años parecían sentirse felices con sus negocios de intercambio comercial con los vecinos haitianos durante los días lunes y viernes de cada semana.
Se recuerda que antes de la pandemia, según las estadísticas del momento, se movían alrededor de 150 millones de pesos por mercado y 200 millones de dólares en solo 8 mercados/mes, lo en los últimos 5 años provocó una dinámica económica en la vida de los pobladores de aquí, que para muchos fue considerada asombrosa.
Mientras que hoy en un abrir y cerrar de ojos, la mayoría considera que la paz y la tranquilidad familiar de los fronterizos llegó a su fin.
Consideraron que a lo que les denominaban la gallina que ponía los huevos de oro ya es cosa del pasado luego de la pandemia del COVID19, la cual es considerada una real tragedia contra miles de familias.
Explicaron que en el mercado dos veces por semana se ganaban el pan de sus familias sin tener la necesidad de acudir a la solicitud de un empleo del gobierno.
Dicen sentirse ahogados por las deudas y si el gobierno no interviene cuanto antes hasta sus hogares los perderían, por lo que reiteran su intervención antes de eso suceda.
Los mercaderes solicitan el auxilio del gobierno para que busque una salida de colaboración tal «y como el mandatario ha intervenido varios sectores económicos para aliviar a tantas familias que tenían sus negocios en los mercados, que acuda en su favor como único medio para sobrevivir con sus familias».
Según la Federación de Comerciales y la Asociación de Vendedores, ya no tienen donde recurrir con la presión de los bancos y las hipotecas de sus hogares.
Explicaron que la reapertura del mercado es la única esperanza que les queda para sobrevivir «y eso está en las manos del presidente Luis Abinader».