Por Germán Reyes
Santo Domingo.- El cierre de la frontera en prevención al contagio del coronavirus por parte de Haití fue una decisión adoptada de manera improvisada, sin que se hayan adoptado las previsiones de lugar, consideró el sacerdote Edwin Paraison, director ejecutivo de la Fundación Zile.
En territorio dominicano se habían detectado 11 casos de pacientes con el virus que ya adquirió el rango de pandemia, los cuales aumentaron a 21 luego que el ministro Salud Públicas informara este lunes de de diez nuevos casos positivos.
Rafael Sánchez Cárdenas también anunció el primer caso de muerte registrado por contagio local, el de una señora que murió ayer por varias complicaciones, incluyendo VIH “Es el primer de transmisión local que se reporta en el país”, agregó el ministro de Salud Pública.
Paraison calificó de excelente la campaña que tanto República Dominicana como Haití realizan para sensibilizar a la población, con el apoyo de los medios de comunicación. En ambos países la información difundida a través de los medios ha sido correcta.
Defendió el derecho de Haití a adoptar cuantas medidas considere pertinentes con miras a preservar la salud de sus ciudadanos.
Si, fue prematura esa decisión prematura, dijo Paraison en una entrevista que concedió a la televisora CDN, para referirse al cierre de la frontera por decisión unilateral de las autoridades haitianas.
En su opinión, es una decisión que debió adoptarse después de una coordinación con las autoridades dominicanas, de manera bilateral.
“Las autoridades de los dos países tuvieron todo el tiempo para provocar en la frontera alguna reunión, una del nivel político y otra del nivel técnico, de los cancilleres y de los ministros de salud”, precisó.
Advirtió que cualquier medida en la frontera pudiera verse un tanto negativa. Hubiese sido mucho mejor que las autoridades de los dos países se sentaran para coordinar sobre las medidas sanitarias de control del coronavirus en la isla y ver de cuál manera, de manera específica, pueda evitarse el contagio en Haití.
Se refirió a la debilidad que acusa el sistema de salud de su país, donde deben aplicarse medidas para evitar el asomo del primer caso.
El también ex cónsul haitiano en República Dominicana declaró que la medida pudo venir en cualquier momento, pero debió tomarse en cuenta el reglamento sanitario internacional, acordado a través de la Organización Mundial de la Salud (OMP) sobre la manera de manejar una pandemia.
Es normal que Haití por razones fundamentales pudiera adoptar medidas de control para prevenir el coronavirus con República Dominicana por los casos registrados de gente que ha viajado desde Europa, el mayor flujo de turistas y la cercanía de las dos naciones.
Refirió que con Estados Unidos hay muchos más casos y se ha dejado abierto todo el tráfico de ciudadanos de ambos países.
Paraison se refirió a la pertinencia de que sean dispuestas medidas compensatorias para apoyar a los haitianos de escasos recursos, toda vez que afectará de manera directa la parálisis en el pequeño comercio transfronterizo.
Citó el caso de Canadá, que aunque es un país desarrollado, dedicó 10,000 millones para mitigar los efectos de las medidas adoptadas.