Panamá, 1 jun (Prensa Latina) El levantamiento hoy de la cuarentena obligatoria por Covid-19 en Panamá recibe aplausos, críticas y reservas, según opiniones de quienes lo interpretan como una carta de libertad o pronostican el rebrote de la pandemia.
La posición oficial, defendida en múltiples declaraciones por la ministra de Salud (Minsa), Rosario Turner, reafirmó que la decisión de terminar parcialmente el confinamiento respondió a criterios científicos sobre control de la pandemia, los cuales se explican solo con la baja tasa percápita de contagio.
A partir de este lunes se mantendrá diariamente un toque de queda de las 19:00 a las 05:00 hora local y seguirán activos cercos sanitarios entre la capital y el Este del país, además de libre movilidad hacia el occidente solo hasta La Chorrera, cabecera de la provincia Panamá Oeste y también lo aplicarán a otros territorios del país..
El cruce por tales cercos es para quienes vivan del otro lado o justifiquen algún tipo de actividad impostergable, como el transporte de carga por carretera, el acarreo de alimentos y las actividades relacionadas con la salu y la seguridad, entre otros.
‘Hemos iniciado una ruta hacia la normalidad, pero esto no significa que se abrió el país, pero nosotros tenemos que buscar un equilibrio entre los aspectos de salud, económico y social’, afirmó ayer Turner durante un recorrido por el populoso distrito de San Miguelito.
Las propias autoridades del Minsa advirtieron que si hay un retroceso se aplicarían de inmediato nuevas restricciones y cierres de aquellas actividades que puedan crear focos de infección, al tiempo que advirtieron de que se mantendrán los cordones sanitarios en los lugares donde actualmente se detectaron contagios masivos.
Las más fuertes críticas a la flexibilización provienen del propio sector de la Salud, pues ayer la Asociación de Médicos Especialistas del hospital público Santo Tomás, en esta ciudad, envió una carta abierta al Gobierno Nacional y la ciudadanía panameña cuestionando el levantamiento de la cuarentena, donde negaron que la epidemia esté controlada.
‘Se nos dijo que con la disminución de los casos nuevos y con una tasa de transmisibilidad baja era confiable proceder con la apertura, pero estas dos condiciones no se han presentado’, señalaron los galenos, quienes advirtieron que el fin del aislamiento pudiera provocar el colapso del sistema de salud.
Los médicos piden la apertura del muy publicitado hospital modular, el cual se terminaría en 30 días, pero 80 jornadas después de iniciado aún no está operativo, y sobre el tema, Turner dijo que se gestiona la compra de respiradores artificiales en Estados Unidos para esa instalación de 100 camas de cuidados intensivos e intermedios.
A partir de este lunes se mantendrá diariamente un toque de queda de las 19:00 a las 05:00 hora local y seguirán activos cercos sanitarios entre la capital y el Este del país, además de libre movilidad hacia el occidente solo hasta La Chorrera, cabecera de la provincia Panamá Oeste y también lo aplicarán a otros territorios del país..
El cruce por tales cercos es para quienes vivan del otro lado o justifiquen algún tipo de actividad impostergable, como el transporte de carga por carretera, el acarreo de alimentos y las actividades relacionadas con la salu y la seguridad, entre otros.
‘Hemos iniciado una ruta hacia la normalidad, pero esto no significa que se abrió el país, pero nosotros tenemos que buscar un equilibrio entre los aspectos de salud, económico y social’, afirmó ayer Turner durante un recorrido por el populoso distrito de San Miguelito.
Las propias autoridades del Minsa advirtieron que si hay un retroceso se aplicarían de inmediato nuevas restricciones y cierres de aquellas actividades que puedan crear focos de infección, al tiempo que advirtieron de que se mantendrán los cordones sanitarios en los lugares donde actualmente se detectaron contagios masivos.
Las más fuertes críticas a la flexibilización provienen del propio sector de la Salud, pues ayer la Asociación de Médicos Especialistas del hospital público Santo Tomás, en esta ciudad, envió una carta abierta al Gobierno Nacional y la ciudadanía panameña cuestionando el levantamiento de la cuarentena, donde negaron que la epidemia esté controlada.
‘Se nos dijo que con la disminución de los casos nuevos y con una tasa de transmisibilidad baja era confiable proceder con la apertura, pero estas dos condiciones no se han presentado’, señalaron los galenos, quienes advirtieron que el fin del aislamiento pudiera provocar el colapso del sistema de salud.
Los médicos piden la apertura del muy publicitado hospital modular, el cual se terminaría en 30 días, pero 80 jornadas después de iniciado aún no está operativo, y sobre el tema, Turner dijo que se gestiona la compra de respiradores artificiales en Estados Unidos para esa instalación de 100 camas de cuidados intensivos e intermedios.