Por Germán Reyes
Santo Domingo.- Las bandas armadas tienen el control de la seguridad pública en Haití, lo cual les permite actuar a la libre, a plena luz del día, sin que sean molestados por las autoridades salvo casos excepcionales, reportes de los medios de la capital, Puerto Príncipe.
Solo un día, el pasado domingo, día 1, las pandillas secuestraron a diez personas y sustrajeron vehículos “en el contexto de enfrentamientos entre varias bandas en Croix-des-Bouquets, Tabarre y Cité Soleil”, reseñó el periódico Le Nouvelliste.
De acuerdo con el diario, los testigos informan que decenas de personas murieron, las casas fueron incendiadas y miles de familias tuvieron que huir de sus hogares.
En un período desde el inicio, las sangrientas hostilidades «programadas» de las pandillas han dejado más de medio centenar de víctimas inocentes, estableció en un comunicado la Junta Directiva de la Cámara de Comercio e Industria Franco-Haitiana (CFHCI), informó el diario Rezo Nòdwès.
Se han registrado más de medio centenar de víctimas de los conflictos armados entre las bandas «400 Mawozo» y «Chyen mechan», según la organización de derechos humanos Reference-Haiti.
La organización expresó su “profunda preocupación por la irresponsabilidad de los miembros del Consejo Superior de la Policía Nacional (CSPN) ante el espectáculo de violencia que se vive en la llanura de Cul-de-Sac”, que se extiende desde la capital, Puerto Príncipe, hasta la frontera con República Dominicana.
El presidente de la Junta Directiva de la CFHCI, Gregory Brandt, declaró que los enfrentamientos de grupos armados paralizan las actividades económicas en las áreas de Damien, Drouillard, Croix-des-Bouquets y otras, además de que ponen en riesgo a los empleados, puestos de trabajo e importantes inversiones de las empresas industriales ”, sin mencionar, sin embargo, la paralización de las actividades escolares.
“Este silencio de las autoridades de turno es tanto más inaceptable”, dijo, al tiempo que defendió directamente a las empresas Barbancourt y Les Aliments Congelés, “incapaces de operar con normalidad y que, según él, “respetan escrupulosamente sus obligaciones fiscales y legales” hacia el fallido estado de Haití.
