Por Manuel de Jesús Báez
Te escribo desde hoy, MADRE.
No sé en qué lugar del Espacio estás.
Posiblemente en un cementerio abandonado
O en un sepulcro desubicado del planeta.
Te escribo para decirte que Recuerdes que todavía se celebra un día para ti.
Si un día para ti. Eso dice la radio y la televisión.
Lo que no imagino para cuantas madres más, pero necesitan vender tus cariños, tus encantos Y TU Abnegación.
Desde hace muchos años escucho hablar de ese día.
Y a veces sé que lo recordamos todos los hijos,
Pero sé que el hijo que más lo recuerda, madre,
Es aquel hijo que te robó los sueños.
Si aquel hijo dueño de la fábrica y la tienda,
Propietario del regalo, la emisora y sus anuncios
Dueño del capital y de la funeraria
Propietario del banco y sus banqueros
Te hablo de aquella imagen que no conoces
Pero te desea felicidades en cada año
Y en cada año viene con una oferta nueva
Tintada de trampas y engaños
Inventadas sobre tus sueños malogrados
Sobre aquel sueño de ver al hijo graduarse
Vivir en una sociedad segura, prospera y justa
Donde el llanto del engañado no exista
Ni la tristeza creada por la desesperanza
Del hijo que quiso y no pudo ser hombre de bien
Y de familia y que apenas llegó a los 30
Porque desafiando al dueño de las riquezas
Cayó en su trampa y mordió el anzuelo
Que yacía tendido sobre unas redes invisibles
Tejidas con los siglos y desde hace siglos
Unas redes resguardas y cuidadas
Por seres de abajo para resguardar a los de arriba.
Si madre, a esos que con un ladrido
Despiertan y Corren en manadas a proteger la cría tenebrosa de la opresión.
Son los mismos, madre, que sazonan la palabra democracia,
que se alimentan de libertad y de derechos.
Son perros sabuesos
roen y comen cerebros de piensamientos diferentes, doman a ritmo de palos, y gatillazos.
Si ellos los que sepultan cada año a tus hijos
En un mal de la ignorancia.
Si madre, esos que son dueños de la salud y la medicina que te han de curar, si tu plata da para pagar.
Se que no me entiendes lo que quiero decir.
Pero sé que cuando leías un diario, me contabas sorprendida la noticia: caen tres “delicuentes” que robaron un banco, asaltan familia y la despojan de sus pertenencias.
Ah, lo recuerdas madre….se que también recuerdas y que nunca olvidas aquella matanza de aquellos abriles del 65 y el 84, si cuando tus hijos se rebelaron contra la ignominia y la injusticia.
Se que lo sabes y recuerdas muy bien,
porque me lo contabas,
30 años de horror y de terror,
12 años de barbaries y crímenes horrendos.
Recuerdo que me dijiste que te decían que eran terroristas y desadactados sociales.
No recuerdo, pero me llega, que te oi decir que amenazaban la paz pública.
Me alegro mucho haberte escuchado a ti y a mi padre hablar de tantas cosas,
de tantas iniquidades,
abusos y corrupción.
Recuerdo a papá cuando decía: solo caen los chiquitos, los pejes gordos nadie los toca”.
Se que los dos están celebrando sus días con orgullo de no ser seguidores de esos que robaron sus sueños y que no cesan de llenar la bóveda de los sueños de 10 millones de dominicanos que viven todavía el sueño de oír decir que se acabó la corrupción y que tengo amigos pero no cómplices.
Por mi parte te digo, que todo ha cambiado y que tus sueños se están cumpliendo.
Ya ningún funcionario coge el dinero del estado para regalarlo, ni hacer banquete, ni rifa ridícula a la miseria en este día de las madres,
ni existe un barrilito, ni el dinero se gasta a la brigandina, madre.
La fundita y el correr detrás de un camión terminó.
Los funcionarios de ahora son serios y honestos, no acosan, no tocan el dinero del erario, no malgastan, solo dos o tres loquito hablan de ALI BABA y los 40 sujetos.
Pues la lotería ya no hace trampra, ni está al servicio de los banqueros. La lotería la cerraron para que nadie sueñe boberías.
Te puedo asegurar que esos muertos en los cuarteles, se generan por accidente,
ya la policía no da macanazos,
ni tiros,
ni persigue, ni macutea, ni apoya la delincuencia, ni persigue ladrones de cuello blanco.
ni se forman nuevos delincuentes por falta de oportunidades.
Ya las torturas desaparecieron de los cuarteles. Tenemos una policía modelo, bien formada y respetuosa de los derechos ciudadanos.
Nadie se asusta cuando la ve llegar. Todos nos sentimos protegidos.
Eso del desempleo, ni decirlo, Ya no son los del partido los que van a los puestos, eso se acabó madre, puedes dormir tranquila donde quiera que estés.
Aveces pienso que este es un sueño y no quiero jamás despertar, ni que me de insomnio.
Pues no quiero escuchar ni leer discursos llenos de palabras bonitas que dañen los cambios de reversas en el país.
Si madre, discursos que deterioren el medio ambiente y los recursos naturales,
de entregar: el oro, las tierras, el carbonato de calcio, las playas; el yeso, el larimar, la bauxita, las aguas, las industrias, etc.
Ya no hay nombres raros como la Rosario, la golf an western, La Bedford. Ya Pueblo Viejo y la Sierra del Bahoruco, la cueva del Pomier, se escuchan al amanecer alegres y lluviosas.
Recuerdo que me hablaste de los bienes en esa forma. Duerme tu sueño tranquila y jamás pienses que aparecerá una Ley de Privatización ni capitalización de las empresas, mucho menos se hablará de FIDEICOMISO. No, eso jamás.
Ah olvidaba lo que me dijiste de la migración y la frontera.
Creo que eso ha cambiado totalmente y de qué manera, madre. Ya no hay macuteo con los inmigrantes y los militares.
Todo el que pisa estas tierras sin los papeles aquellos, lo montan en una verja y en un APARATICO LLAMADO DRON, ESO ES UN ASUNTO MODERNISIMO Y LO TIRAN AL OTRO LADO.
ESO SI QUE SI VUELVEN, LE DAN SU MERECIDO.
PERO NO HAY DISCRIMINACION NI RACISMO.
Quiero terminar, madre, diciéndote que aquí los precios cayeron como la papeleta de Lilis, hoy nuestra moneda es más fuerte que cualquier moneda extranjera. Ya no hay que preocuparse por precios altos, varios países vienen aquí a comprar por lo bueno de los precios.
Yo mismo tengo un almacén cargado de democracia que no sé qué hacer,
pues cuando voy al mercado de los derechos, con una chilata tengo que buscar una furgoneta para cargar la compra de los nuevos derechos constitucionales.
Te digo que se me pudren los derechos y tengo un exceso de ahorro. En verdad te digo que no sé qué hacer con tanta abundancia y felicidad.
Termino diciéndote, si puedes ven, ya no hay que desearse la muerte. Tenemos la mejor seguridad social del mundo, toda la medicina es publica y ya no hay que pagar diferencia, ni te mueres porque no te reciben en una clínica.
Esto se ha superado tanto, que todos los muertos quieren salir a disfrutar de este paraíso.
Así que lo que me has contado ya es cosa del pasado. Ven y cuéntale a los que se han ido por si quieren regresar a este enorme sueño.
Disfruta tu día a plenitud madre y no te atrevas, si vienes, a despertarme de esta gran pesadilla.
Hasta pronto…
Tu hijo: MJB.
