Por Germán Reyes
Santo Domingo.- La reunión de este 30 de julio de los seguidores del presidente Danilo Medina en el Partido de la Liberación Dominicana (PLD) en el Comité Central, equivalentes en número al 76% de la matrícula (467 de 613), generó una euforia que llevó a que no pocos proclamaran en ese contexto el “deber” de dejar fuera de la contienda electoral por la presidencia de la República al doctor Leonel Fernández, quien fuera tres veces presidente de la República.
“Somos el PLD grande”, dijo uno de los miembros del máximo organismo directivo del partido oficialista entre Congreso y Congreso para exhibir músculos frente a la corriente que encabeza el ex presidente Fernández.
Los seguidores de Medina en el CC optaron por mostrar sus fuerzas y a la vez tomar decisiones a propósito de la reunión que ha sido pautada para el próximo día diez de agosto, el escenario partidario donde ha de decidirse quiénes van y quiénes no a las elecciones internas para optar por cargos de los tres niveles: municipal, congresual y presidencial.
Ya antes, el organismo directivo peledeista debió decidir sobre si las elecciones primarias sean cerradas, con la participación de solo los miembros registrados en el padrón de la Junta Central Electoral; o abiertas, con todos los ciudadanos y la sola exclusión de los adeptos a las fuerzas opositoras.
Después de agrias polémicas y el lanzamiento epítetos contra danilistas, los leonelistas debieron plegarse a la postura que enfrentaron (la de las primarias abiertas) y se plegaron para, incluso, evitar que les sean contados los votos.
El nuevo escenario
El presidente Medina, después de una extensa campaña de sus seguidores para que se proclame aspirante a la candidatura presidencial por su partido, decidió desistir después que recibiera una llamada de parte de un emisario del presidente de Estados Unidos, Donald Trump.
Mike Pompeo, secretario de Estado de EE.UU., advirtió al presidente dominicano sobre sus propósitos de propiciar una reforma constitucional para facilitar su repostulación, según informó la Embajada de esa nación en República Dominicana.
Al anunciar su postura, el jefe del Estado dominicano no escondió que había contemplado optar por la candidatura a la repostulación y anunció que en lo adelante habrá “sangre nueva”.
Acto seguido, Medina propició reuniones con su séquito de aspirantes a la candidatura presidencial y les instó, nueva vez, a que refuercen sus trabajos en la base de la sociedad y del PLD. Entonces inició la etapa de la identificación del delfín danilista.
Para la tarde de este miércoles, 31 de agosto, está previsto el lanzamiento de la precandidatura del ministro de Obras Públicas, Gonzalo Castillo, uno de los más cercanos colaboradores del Presidente de la República.
Para su comparecencia ante la nación, cercanos a Castillo han hecho saber que también anunciaría su renuncia a su condición de ministro para dedicarse a tiempo completo a sus labores políticas, tal como hicieron los ministros de Educación y el de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
De esa forma, Castillo cerraría filas en la lucha interna del PLD contra el ex presidente Fernández con los también danilistas Andrés Navarro, Francisco Domínguez Brito, Carlos Amarante Bared, Reinaldo Pared Pérez, Juan Temístocles Montás, Manuel Crespo, Maritza Hernández, Hipólito Polanco y Radhamés Segura.