Un comunicado de la Cancillería indicó que se constituyen, además, en una «intromisión inaceptable» en asuntos que son de exclusiva competencia de los venezolanos.
Subrayó que Guaidó está siendo investigado por el manejo premeditado y negligente de activos pertenecientes a la empresa Petróleos de Venezuela S.A.
La nota puntualizó que estos generaron cuantiosas pérdidas, «hecho corroborado por el propio sistema estadounidense», a través de recientes revelaciones de una Corte del estado de Delaware, que denunció el uso personal, por parte del indiciado, de más de 19 mil millones de dólares.
La Corte de Delaware determinó que el político venezolano Juan Guaidó habría utilizado recursos de la empresa petrolera estatal PDVSA “para financiarse” con US$19,000 millones y la obligó a aceptar sus términos de refinanciamiento, ocasionando una pérdidas por ese monto
Venezuela, afirmó, es un país soberano y exige respeto a sus leyes e instituciones.
Condenó asimismo cualquier intento de minimizar la corrupción con justificaciones políticas y exigió al gobierno estadounidense «ceñirse al principio universal de no injerencia en los asuntos internos de los países y respetar los compromisos de combate a la delincuencia organizada».
Entregar al acusado a las autoridades venezolanas para que se le siga su proceso judicial con todas las garantías de la ley, sería la mejor demostración de que Estados Unidos «está verdaderamente comprometido con la lucha contra la corrupción», remarcó el texto.