El Congreso de la Fidh acuerda poner la vida digna en el centro y construir poder desde los pueblos y las víctimas

  • Con la participación de más de 200 organizaciones de 115 países, el 42° Congreso de la Federación Internacional por los Derechos Humanos (FIDH) convirtió a Bogotá en el epicentro del debate global sobre los desafíos actuales para la democracia, la justicia social y la paz.
  • Figuras como la Nobel de Paz 2022, Oleksandra Matviichuk, y el relator Especial de la ONU, Olivier De Schutter coincidieron en que las crisis climática, social y política exigen respuestas colectivas y centradas en la dignidad humana.

Bogotá.- Durante tres días de reflexión y diálogo, el foro abordó temas cruciales como la justicia transicional, la protección de defensores de derechos humanos y del medioambiente, la participación de las mujeres en los procesos de paz y los retos de una transición ecológica justa. Las discusiones giraron en torno a la urgencia de proteger los espacios democráticos en un contexto global de auge autoritario y desigualdad creciente.

Entre los asistentes se destacaron figuras internacionales como Sonia Corrêa, reconocida activista feminista brasileña; Dismas Kitenge, jurista y cofundador del Groupe Lotus de la República Democrática del Congo; y Olivier De Schutter, relator especial de la ONU sobre la pobreza extrema. Todos coincidieron en que el momento actual exige una renovación del compromiso con los valores universales de la justicia y la libertad.

“El foro nos deja una certeza: tenemos muchos desafíos y están profundamente interconectados. Justicia, democracia, igualdad de género, modelo de desarrollo, paz y defensa del planeta no son causas separadas, sino expresiones de una misma lucha: poner la vida digna en el centro y construir poder desde los pueblos y las víctimas”, expresó Gutiérrez, en representación de las organizaciones sociales.

El Congreso mundial de derechos humanos realizado en Bogotá llamó a defender la democracia y la justicia social frente a los retrocesos globales

Los participantes reafirmaron que “sin igualdad no hay democracia, y sin participación social no hay libertades que perduren”, destacando la necesidad de fortalecer las capacidades de las organizaciones sociales para proteger el espacio cívico y usar las plataformas digitales como herramientas de resistencia y movilización democrática.

El embajador de la Unión Europea en Colombia, François Roudié, reconoció el trabajo de las organizaciones presentes y subrayó que “los derechos humanos son universales e inalienables”. En su intervención, advirtió sobre los retos globales: “Estamos viviendo tiempos de crisis: climática, de desigualdad, de tensiones geopolíticas y de retrocesos democráticos. En muchas regiones, los defensores siguen siendo amenazados y asesinados por su labor. Todos estos factores de crisis interactúan y se agravan sistemáticamente”.

El diplomático hizo un llamado a que las conclusiones del Congreso “trasciendan esta sala” y se traduzcan en acciones concretas en los territorios y en las políticas públicas de cada país.
El evento culminó con una emotiva presentación artística de La Morena del Chicamocha, proyecto musical de la cantautora Magdalena Moreno, que fusiona el bullerengue tradicional con narrativas políticas y de resistencia, símbolo del espíritu que marcó el encuentro: la defensa de la vida, la libertad y la justicia a través del arte y la palabra.