Por iniciativa de varios barrios amenazados por los feroces ataques de bandidos armados de la coalición «viv Ansanm» (Vivamos Juntos), como Canapé-Vert, Lalue, Turgeau, Débussy, Pacot, Bourdon, Juvénat, así como ciertas zonas de Pétion-Ville y Delmas, se realiza una nueva jornada de manifestaciones en Puerto Príncipe este miércoles 2 de abril de 2025. Esta manifestación tiene como objetivo denunciar la violencia armada en Haití y pedir al Gobierno y al Consejo Presidencial de Transición (CPT) que trabajen para restablecer la paz y la seguridad en el país.
Por Célou Flécher
Puerto Príncipe (EL FACTOR HAITÍ), 2 de abril de 2025. — Miles de haitianos de diversos barrios de Puerto Príncipe, y las comunas de Pétion-Ville y Delmas en las calles 19, 29 y 30, así como desplazados de Carrefour-Feuilles, Solino, entre otros, han vuelto a salir a las calles del área metropolitana para denunciar la violencia armada perpetrada por bandidos armados de la coalición «Viv Ansanm» (Vivamos Juntos).
Se trata de un evento multidisciplinar que reúne a los residentes de Canapé-Vert, Lalue, Turgeau, Débussy, Bourdon, Pacot y Juvénat, entre otros.
Armados con esposas y palos algunos, expresan su frustración a las autoridades gubernamentales por los abusos de los que son víctimas por parte de pandilleros que al invadir los barrios violan, matan, saquean e incendian sus casas y negocios.
Otros, con el mismo propósito, agitaron ramas de árboles y lanzaron críticas contra el Primer Ministro Alix Didier Fils-Aimé, los ministros de su gobierno, así como el Presidente y los consejeros presidenciales del CPT.
Al inicio, los manifestantes levantaron barricadas y prendieron fuego a neumáticos en varias calles y carreteras, paralizando el tráfico.
Asimismo, se declaran hartos de la situación actual en Haití y piden al gobierno central que dote de material a las fuerzas armadas haitianas para poder enfrentar mejor a las organizaciones terroristas.
En apoyo a esta iniciativa “cívica y responsable”, algunas escuelas están cerrando sus puertas, los negocios comerciales y los conductores están entregando las llaves a los propietarios.
Decidimos dejar a nuestros hijos en casa por una buena causa: proteger nuestros barrios, nuestras vidas y nuestras inversiones, declaró este hombre, casi sesentón, en medio de un mar de gente. “Es una batalla despiadada que requiere el fortalecimiento y el apoyo del Estado para frustrar los planes de los bandidos que quieren matarnos y apoderarse del país”.
Cabe recordar que los organizadores de la ola de protestas se propusieron llegar hasta el frente de la Villa d’Accueil de Musseau (Delmas 60), lugar de trabajo del Gobierno y del Consejo Presidencial de Transición.
