Por Germán Reyes
Santo Domingo.- El acto que en Puerto Plata encabezó Mildonio Adames, conocido como El Peregrino, fue precedido por una violación de la Catedral por parte de desconocidos que penetraron por la parte de atrás sin autorización y facilitaron el ingreso de una multitud, declaró el obispo de la Diócesis, monseñor Julio César Corniel.
“Las puertas de la parte trasera de la Catedral estaban abiertas porque en ese momento eran entrados unos equipos, penetraron sin autorización y abrieron las puertas”, dijo el prelado en declaraciones que ofreció a una estación radial.
El obispo Corniel informó que la iglesia de Puerto Plata no recibió ninguna solicitud para realizar una ceremonia, pese a lo cual los feligreses entraron y fueron atendidos.
“Un sacerdote bendijo la cruz después de encontrar a El Peregrino y la multitud en la catedral y les instó que de inmediato salieran del lugar”, dijo el religioso.
No fue un acto de fe
De otro lado, el obispo de la Diócesis de Puerto Plata declaró que la movilización del público ni el acto promovido por Adames tenga sentido religioso. “Ese fue un acto más emotivo que de fe”.
El prelado dijo que, por disposición de la Conferencia del Episcopado Dominicano todas las actividades religiosas se realizan en espacios cerrados después de los tiempos de la pandemia por la circulación del coronavirus.
