Por Joaquín Luna
Barcelona, La Vanguardia.- La cordobesa Susy Gala fue “el mejor culo de España” en el 2014 y tal distinción le reportó una portada de la revista Interviú. La publicación ya no existe y el concurso sobre el mejor culo de España –por votación entre internautas– tampoco.
Susy Gala, en cambio, existe y sigue viviendo en Barcelona, con 27 años y una vida que expone en las redes donde sus seguidores –algo así como socis del Barça pero sin cabrear– pagan una cuota mensual para acceder a los contenidos que cuelga, sola o con su pareja.
–Rondo los mil seguidores. De todo el mundo. Pagan 20 dólares al mes. Y ahora, dadas las circunstancias, he rebajado a 10 dólares para las altas.
–Yo creía que el confinamiento era el agosto del sexo virtual.
–No tanto, nueve de cada diez seguidores míos son hombres, el resto parejas. Estos días los hombres tienen mucho tiempo libre pero poca intimidad. Y tampoco pueden conectarse desde los centros de trabajo.
Hoy sólo hay sexo con amor.
La industria ha bajado la persiana con el coronavirus aunque algunos empresarios del sector avisan: las personas que ejercen la prostitución –con fama de vivir al día– terminarán trabajando en apartamentos clandestinos o a domicilio.
–¿¿¿A domicilio estos días???
–Sí. Nosotros cerramos nuestros locales por responsabilidad antes de que fuese obligatorio. Hay personas, sobre todo jóvenes, que no tienen sensación de riesgo. Y terminarán echando un polvo… Al tiempo.
Habla un directivo de la empresa que gestiona dos locales cuyos grandes carteles dan la bienvenida a Barcelona, sin necesidad de muchas aclaraciones (Apricot y Girls). No se confundan, aunque sea fácil: tienen una plantilla fija de entre 40 y 60 empleados y licencia de “bar musical con reservados para servicios sexuales”. O sea, ofrecen un espacio higiénico e íntimo y las copas. Usted pone el resto…
Apricot o el mítico Bagdad, “el harén del Paralelo” de Nou de la Rambla –el primer templo del porno de Europa, presumía su publicidad en los ochenta– han presentado ya expedientes de regulación temporal, el más potente antídoto contra la lujuria.
Susy Gala, de nuevo, tiene un panorama diferente y donde otros sufren una crisis, ella atisba una oportunidad. ¿Quién duda que las redes no empoderan, abren horizontes y permiten crearte un buen puesto de trabajo? Como centenares de mujeres de todo el mundo, forma parte de la red Only Fan, una multinacional con sede en Londres que expone –lo que se conoce como una “plataforma”– a personas tirando a jóvenes cuyas cuentas en Instagram dejan entrever que hay vidilla más allá del zaguán.
Y tiene un precio.
Ahí es donde entra en acción el seguidor – follower , una suerte de tribunero obseso– porque una vez elegida la mujer de tus sueños existe la posibilidad de acceder desde el móvil a contenidos subidos de tono o incluso pedirle y pactar escenas a medida.
No todo es sexo.
–Estoy obligada a vivir conectada la mayor parte del tiempo. Igual cuelgo mi paseo con el perro, la compra en el supermercado o respondo a un seguidor.
–¿Cuánto se queda la plataforma y cuánto es para usted?
–El 30% del negocio que se genera es para ellos. Yo cotizo como autónoma. Pagamos impuestos.
Estos días, insiste, son flojos. Al parecer, mucho follower está casado y con compromiso.
No todo es sexo pero casi.
Juani de Lucía, la dueña del Bagdad, abierto en 1975, siempre ha mantenido cierta atmósfera familiar en una sala única donde igual un fakir, el gran Kuman, levantaba una campana de no se cuantos kilos con un golpe de pene como pedían un voluntario sin inocencia para subir al escenario.
–¿Aún actúa Dinio?
–Pidió excedencia para participar en un concurso de televisión y estaba estos días de vacaciones en Bulgaria con su mujer y los pobres no pueden volver. Su hermano Rafa sigue con nosotros.
Lo dicho, el Bagdad tiene algo de familia. Y esto es un batacazo. El periodista aventura que cuando pase lo peor, Barcelona será una juerga, un desenfreno, una fiesta, como diría Hemingway.
–Ojalá pero costará porque dudo que venga turismo extranjero en verano. Nosotros, seguro, abriremos en cuanto podamos.
–La epidemia del sida también parecía el fin del mundo…
–Tuvo impacto pero menos del que tiene el coronavirus. Magic Johnson estuvo en la sala y llegaron a publicar que pilló el sida en el Bagdad. Lo desmintió, era muy simpático.
Uno de los responsables de Apricot también rebaja la hipótesis optimista de que tras la cuarentena llegará la calentura. “La gente no recuperará de un día para otro la confianza para las relaciones. Ojalá podamos reabrir pronto. Sin actividades como la nuestra, habría más violencia sexual en la calle”.
Pornhub, una de las webs más potentes del mundo, con sede en Chipre, registró un alza de visitas del 61% el primer día de su “¡Vamos España!”, contenidos prémium gratuitos.
–¿Y qué es lo que más piden a Susy Gala los followers en cuanto a contenido privado a medida?
–Fotos mías desnuda con carteles con su nombre. Y en cuanto a vídeos, el más habitual es que me masturbe mientras me dirijo a ellos diciendo su nombre.
Hoy todo son propuestas para levantar el ánimo.