Por Germán Reyes
Santo Domingo.- Las Misioneras Dominicas del Rosario, que realizan labor de pastoral en El Seibo, comparten una tarjeta navideña siu géneris, muy especial. En el mensaje se describe un escenario en el que los haitianos en el proceso de deportación refieren las vicisitudes durante la travesía hacia la frontera.
Aquí estamos, aquí vamos… Mejor dicho, nos llevan. Es la expresión con la que inicia el mensaje. “Dicen las malas lenguas que no comeremos ni beberemos nada hasta…”.
El mensaje de la tarjeta insinúa que los haitianos hasta defecan por la imposibilidad de lograr que en caso de necesidades fisiológicas el vehículo (la “camiona”) sea detenido ante sus súplicas.
Tampoco iremos al servicio hasta… Alguna gente ya no aguanta y lo hace aquí dentro como puede.
“Llevamos horas en esta camiona”, describe el mensaje de la tarjeta navideña para referir el tiempo durante el recorrido, que puede ser desde la cárcel de la DGM en Haina o la de Santiago. En un caso son llevados al paso fronterizo de Jimaní, pero mayormente al de El Carrizal, en Elías Piña. Y si fuera desde Santiago el destino sería Dajabón.
Con negritas son nuestras (GR)
Por sexo: Hay quien vende libertad por dinero o sexo… Otros quieren comprar libertad por dinero o sexo.
El macuteo: Escucho que alguna gente que va con nosotros ha conseguido un préstamo por 10,000RD y ya no llegará a la frontera.
Segregan la familia: Nuestro niño hace rato que llora… Los hijos de los que viajan con nosotros no lloran porque no están. Se han quedado solos sin saber qué les está pasando a sus padres.
La madre María: Ya me lo dijo el Ángel: “Coge el niño y a su madre María y vete”. Pero no me dijo que me cogerían y me llevarían. A María creo que el Ángel le pintó las cosas muy bonitas. Claro, que también le dijo: “Una espada…”.
Galleticas y jugo: Por los barrotes de la camiona alguna gente nos ofrece galleticas y jugo. ¡Cuánto se lo agradecemos, porque con esta hambre… y este calor!.
Incertidumbre: Y aquí vamos, sin saber que nos pasará porque en la frontera nadie nos espera… a nadie tenemos al otro lado…
Compañía: Lo único hermoso de este viaje es que estamos con la gente que sufre.